INDICE: COMENTARIOS
Capítulo
1: Las Enseñanzas Proféticas
Capítulo 2: El Legado Inmortal
Grupo A: Libros de Historia
Grupo B: Libros de Filosofía
Grupo C: Libros Doctrinarios
Grupo D: Libros Ascético Místicos
Grupo E: Libros Esotéricos
Grupo F: Libros sobre las Comunidades
Capítulo 3: Himno al Maitreya
Capítulo
4: Comentarios sobre el Maitreya
1. El Maitreya
2. Iniciados Solares de Cuarta Categoría
3. El Fuerte Libertador
4.Referencias Escritas en las Enseñanzas
Capítulo 5: El Escenario para el Redentor
1. El Mundo del Tercer Milenio
2. La Época
3. Escenografía conceptual
4. El Poder del Dinero
5. La Destrucción Atómica
6. Devastaciones Ambientales
7. Sexo, Droga y Epidemias
8. Supervivencia
Capítulo
1: Las Enseñanzas Proféticas
El total de las Enseñanzas reunidas en esta colección para
Internet son 625, extraídas textualmente de viejos apuntes dactilografiados
de Retiros, Cursos, Conferencias, textos inéditos, visiones, etc.;
algunos modernos y otros muy antiguos, mensajes de los Santos Maestros,
revelaciones del más allá, todos con la impronta profética
de Santiago Bovisio. Y cada vez que se releen, surge la pregunta inquietante,
todavía sin respuesta: ¿Cuál es la finalidad de esta
Biblioteca Esotérica, inmensa, completa, que permaneció
inmóvil y silenciosa hasta nuestros días, apenas consultada
por unas pocas personas? La obra es gigantesca, no tanto por su volumen
material, sino por la variedad, la extensión de los temas y la
erudición de los conceptos, que van desde la creación de
los mundos hasta la imagen del hombre futuro de la Sexta Ronda, deambulando
por los espacios, traslúcido y brillante, con un gran ojo solitario
en la frente de su nuevo cuerpo de fuego.
Estas Enseñanzas no fueron escritas para tenerlas guardadas en
escondites secretos, inaccesibles y prohibidas; tal actitud contradice
con el espíritu y la letra de las mismas. El Maestro reclamó
que se transmitieran públicamente por todos los medios: "Muchas
almas de América desde lejos esperan ansiosas el Mensaje de los
Hijos de Cafh" (XIX.8.10). "Llevad al mundo angustiado y expectante
vuestro Mensaje de Renuncia" (XIX.11.12). "Se multiplicarán
como Mensajeros de la Renuncia en todos los aparatos de televisión"
(XIX.14.19).
Santiago Bovisio, que en su anterior encarnación fue Sumo Sacerdote
del Templo de Amón, en Egipto, enfrentado a muerte con el herético
Faraón Akenatón durante la Guerra de los Dos Soles, volvió
a nuestra época después de 3500 años de ausencia,
no para atender los problemas domésticos de un puñado de
seguidores, sino para anunciar universalmente la presencia en la Tierra
de un nuevo Redentor de la Humanidad: el Maitreya.
Numerosos capítulos del Curso "Grandes Iniciados de la Raza
Aria" hablan claramente del Iniciado Solar, de su aparición
entre los años 1972-77, de su misión redentora en esta civilización
catastrófica y aniquiladora, y de su aporte indispensable a la
solución de los problemas de la Humanidad. Ningún otro dirigente
espiritual del siglo XX ha trabajado tanto para anunciar y preparar entre
los hombres la Divina Presencia.
El Maestro ha insistido siempre que su misión y la de sus seguidores
es preparar la venida del Redentor. Considerando el grupo que conocía
las Enseñanzas puede decirse que no se produjo ninguna preparación
después de su muerte en 1962, y que las "lámparas de
las vírgenes locas" están todas apagadas. El Redentor
ya está en la Tierra, y nadie lo ha esperado, ni aún aquellos
que tenían esa misión. Debemos creer que había que
esperar el nuevo milenio para que los anuncios formulados por los profetas
tengan validez en los hogares del Planeta. Quien hoy quiera conocer los
detalles de estos maravillosos sucesos reunidos en más de 600 Enseñanzas,
los puede tener instantáneamente en su casa por Internet, y los
portales se abrirán al futuro.
Una segunda hipótesis intenta explicar, aproximarse al misterio
de las Enseñanzas, sus orígenes, sus motivaciones, sus fundamentos,
su historia. Ya hemos dicho en otra parte que Bovisio formaba parte de
la Orden del Fuego en Venecia, y que en 1926 fue enviado a América
para fundar una institución análoga, poco antes de que la
Orden fuera destruida por el Gobierno Fascista de Italia, y ya nunca se
supo nada más de sus componentes, ni de sus documentos. ¿Era
Santiago Bovisio el último superviviente de la venerable y milenaria
institución esotérica? ¿Acaso fue enviado a la Argentina
para resguardar tesoros espirituales y documentos únicos en el
mundo, ante la inminencia de la gran guerra que devastaría Europa?
Ahí se encuentran, protegidos en su aparente insignificancia, textos
en Arypal que sólo pueden ser leídos en la Gruta de Ras
por clarividentes calificados, Himnos inmemoriales y Oms de oculto significado.
Allí se encuentran informaciones antiguas que no se conservan en
ninguna otra parte: los siete recintos secretos del Templo de Amón,
una descripción detallada de la fisiología astral del ser
humano, ceremonias secretas de iniciación, y muchas otras riquezas
desconocidas.
En la primera Enseñanza sobre las Órdenes Esotéricas
se describe la fundación de la Orden del Fuego, en Kaor, centro
de Asia, y su desenvolvimiento secreto por miles de años hasta
su derrumbe definitivo, y la posterior marcha de los sobrevivientes hasta
el centro del Sahara, desde donde irradiaron al resto del mundo. Se infiere
que el sistema específico de las Órdenes Esotéricas
se inicia en Kaor, y ha continuado sin interrupciones hasta ahora. ¿Desaparecerán
las Órdenes Esotéricas en la nueva Subraza Americana que
se inicia? Reiteramos la pregunta: ¿Fue el Maestro Santiago el
último superviviente de una tradición milenaria, y dejó
como legado inmortal sus Enseñanzas?
En el curso mencionado se describe, en otra leyenda, a la Madre Abbumi,
2500 años antes de Cristo, gobernando la Orden en el Hoggar, centro
del Sahara, y los orígenes de las dos grandes corrientes de fuerzas,
la del saber y la del sentimiento, que han caracterizado las religiones
del mundo hasta nuestros días.
En la Guerra de los Dos Soles, unos mil años después, se
expresaron abiertamente y con violencia estas corrientes, Amón
y Atón, que alternativamente se han sucedido a lo largo de la Historia.
Hoy, recambio de épocas y de formas de vivir, la Guerra de los
Dos Soles ha estallado de nuevo: materialismo versus espiritualismo. Y
se presupone que una de las obras principales del Maitreya será
encontrar una solución armoniosa a la controversia: la espiritualización
del materialismo.
Nosotros, promotores de la difusión pública de las Enseñanzas
del Maestro Santiago Bovisio, sostenemos que en estos textos, en el Mensaje
de la Renuncia, y en las Leyes del Universo expresadas en ellos, está
guardada la solución buscada que contribuirá en parte a
la feliz misión del Redentor.
Hay una tercera interpretación sobre el significado de las Enseñanzas:
el propio Santiago Bovisio y su aporte personal, individual a la nueva
Subraza, con sus conocimientos, sus poderes sobresalientes, su memoria
de tiempos históricos, la grandeza de su ofrenda. En la primera
propuesta, las Enseñanzas adelantan, anuncian y promueven al Maitreya.
En la segunda, las Enseñanzas preservan y promueven las tradiciones
y la herencia espiritual de la Orden del Fuego. En la tercera, el Maestro
da su doctrina de la Renuncia, asistido por Instructores Astrales, y la
pone en práctica activamente en la Orden que funda con ese propósito,
por medio del Reglamento y su permanente dirección espiritual.
En reiteradas ocasiones ha proclamado el Mensaje de la Renuncia como la
ley del mundo futuro que promoverá el Iniciado Solar.
Entonces, el aporte personal del Maestro es preparar los instrumentos
espirituales que servirán de herramientas para el trabajo del Maitreya,
y que han sido explicados en las Enseñanzas, y experimentados en
vivo con los Ordenados de Comunidad, mientras estuvo en vigencia el Reglamento
original legítimo. En los libros estrictamente doctrinarios (El
Camino de la Renuncia, La Vida Espiritual de Cafh, Los Mensajes, y otros),
están claramente indicados los preceptos que conformarán
la vida futura del hombre junto al Maitreya, buscando la espiritualización
del materialismo en una armoniosa conjunción de los pares de opuestos.
Ahora todas las herramientas espirituales reunidas y ordenadas por el
Maestro son accesibles, están puestas al día y adaptadas
a la mentalidad moderna, con indicaciones precisas y correctas de cómo
usarlas: diversos tipos de meditación, activos y pasivos, ejercicios
de concentración mental, explicaciones sobre la contemplación
y ejercicios para alcanzarla, gimnasia y posturas físicas, nociones
de economía providencial, recomendaciones sobre el silencio, el
comportamiento social y la vida en familia, etc., y todo lo que enseñó
práctica y teóricamente durante su vida hasta el momento
de abandonarnos. Lo que el lector no encontrará es la Dirección
Espiritual que brindaba personalmente; pero, ¿quién sabe?
El Maestro sigue trabajando en su Obra desde los planos superiores, guiando
a las almas que le son fieles. Cualquiera, aunque no lo haya conocido,
si se adhiere a sus preceptos, se transforma en un Discípulo Fiel.
Capítulo
2: El Legado Inmortal
Estas Enseñanzas constituyen el legado espiritual que un Maestro
de Sabiduría del siglo XX, al finalizar la Quinta Subraza, entrega
a las generaciones futuras de la naciente Subraza Americana, desde el
primer día del tercer milenio. Le pertenecen totalmente, y reúne
lo mejor del conocimiento que una gran mente ha podido acopiar y sintetizar
en el breve lapso de una vida. Es una enciclopedia de sabiduría
esotérica y filosófica, que comienza en los más remotos
tiempos de la presencia humana en la Tierra hasta los más recientes
acontecimientos de la última Guerra Mundial, desde la fisiología
astral del hombre hasta la vida interna de la Tierra. Las cosas materiales
e institucionales que dejó al morir están todas destruidas;
queda el núcleo, el corazón de lo que más amaba,
sus Enseñanzas, que ahora, al ser legadas sin restricciones, pasan
a formar parte del cuerpo místico de la Humanidad.
Las Enseñanzas no están clasificadas. En algún lugar,
el autor hace una clasificación provisoria y general: las Enseñanzas
Universales que están en todas las tradiciones y en todos los tiempos
y pueden encontrarse impresas: los Vedas, la Biblia, etc., y las Enseñanzas
de Cafh que fueron transmitidas por un Maestro Astral, el Celador (Savonarola),
al Fundador, con la Doctrina de la Renuncia. Hay una tercera Enseñanza
de los Oradores que es de transmisión oral.
Debe señalarse que cuando Bovisio dice Cafh se refiere a la Orden
del Fuego, universal y permanente, cuya forma original es astral, y de
la cual devino la Orden terrestre moderna sujeta al nacimiento y a la
muerte, como ocurrió.
Esta colección reúne 37 libros de diversa extensión,
cada uno, por lo general, conteniendo 16 capítulos o Enseñanzas.
Cada Enseñanza trata un tema específico constituyendo una
unidad que puede ser leída independientemente del resto, sin perder
claridad. En realidad, todas las Enseñanzas están relacionadas
entre sí, no sólo en cada libro o curso, sino con la colección
completa. Muchas veces el Maestro Santiago ha expresado que la Enseñanza
es una sola, permanente, continua, sin grietas. Las variadas expresiones
que se observan aquí en su diversidad, y a veces en aparente contradicción,
son facetas que enriquecen y facilitan la comprensión de la Enseñanza..
Hay muchos títulos, y nuestro trabajo en este comentario no busca
una sistematización racional por materias, sino un agrupamiento
que ayude al lector en la búsqueda de los temas y las relaciones
íntimas de cada uno. En este primer intento, hemos agrupado los
libros en seis paquetes afines.
Grupo A:
Libros de Historia; 6 títulos.
Grupo B: Libros de Filosofía; 3 títulos.
Grupo C: Libros Doctrinarios; 11 títulos.
Grupo D: Libros Ascéticos Místicos; 7 títulos.
Grupo E: Libros Esotéricos; 5 títulos.
Grupo F: Libros sobre Comunidades; 4 títulos.
La ubicación
de los títulos no significa una jerarquización de los mismos,
sino un agrupamiento simple. La unidad del conocimiento está en
cada Enseñanza, no en el libro. La Enseñanza encierra los
conceptos que se quieren transmitir unitariamente, y que, en las Reuniones,
el Orador transmitía en voz alta. La página escrita quedaba
en manos del oyente para su estudio; al finalizar el año se devolvían
todas y se quemaban. Las que no fueron devueltas quedaron en manos particulares
y constituyeron el basamento de esta Colección Internet, después
de un largo trabajo de búsqueda.
Grupo
A: Libros de Historia
La Historia
es la ciencia que estudia el devenir humano con fuentes de información
verificables, preferentemente escritas; se inicia en Grecia y alcanza
grandes proporciones en la época moderna con los descubrimientos
de civilizaciones perdidas y la exhumación de sus reliquias. Y
aunque se proyecta hacia sistemas históricos universales, no puede
pasar la barrera de cuatro o cinco mil años atrás.
La Historia que presenta el Maestro Santiago es diferente, porque habilita
otros instrumentos de investigación que no poseen los historiadores
académicos. También es ciencia, pero con leyes distintas,
esotéricas, un conocimiento íntimo y directo de los hechos
narrados por una mente superior. Se utilizan las tradiciones antiguas,
la simbología gráfica y conceptual, el desciframiento de
textos crípticos, las revelaciones suprafísicas, las imágenes
que brillan en los Anales Akásicos, la clarividencia del autor
y otras fuentes no reveladas.
Cuando Tolkien describe en el Aïnulindalé, de El Silmarilion,
la creación de los mundos y el trabajo de los Poderes, no muy diferente
de la Cosmogonía de "El Sistema Planetario", está
haciendo una maravillosa narración de ciencia ficción mitológica;
el Maestro Bovisio hace ciencia esotérica y las fuentes son las
mismas: la Gruta de Ras. J. L. Borges, en "El Alef", escribe
un cuento de realismo fantástico sobre un punto en la Gruta, un
asunto personal e íntimo. Bovisio, en la Enseñanza "La
Gruta de Ras" (VII.7) describe y explica el fenómeno. Borges
asistía regularmente a las reuniones que daba en su casa el pintor
Xul Solar, en donde Bovisio hablaba de estos temas. Tal vez Borges encontró
allí una motivación para su famoso cuento.
Para Bovisio, la Historia del hombre se inicia con la primera individuación,
con la formación de los cuerpos astrales intentando habitar los
cuerpos físicos en las primeras Razas terrestres, millones de años
atrás. De estos conocimientos pueden encontrarse rastros en los
libros sagrados de las religiones, como los Vedas, el Popol Vuh, la Biblia,
las tablillas asirias, las Estancias de Dzian y en otros. El Maestro Santiago
consultaba directamente los Anales Akásicos, como lo hacía
H. P. Blavatsky.
Los libros de carácter históricos son:
Libro IV: Historia del Hombre.
Libro V: Grandes Iniciados de la Raza Aria.
Libro VI: Grandes Iniciados del Fuego.
Libro XVI: Historia de las Ordenes Esotéricas.
Libro XXIII: Religiones Comparadas.
Libro XXIV: Diez Grandes Religiones.
Libro XXVI: Antropogénesis
¿Cómo leer estos extraños libros? Aparecen asuntos
de los que no hay referencias en ninguna parte, personajes y lugares que
nadie ha mencionado, figuras históricas especiales con nuevos ropajes,
como Cleopatra, Catalina de Médicis, Inocencio III y otros famosos;
la Atlántida, los Lemurianos de tres metros de altura, la Raza
Hiperbórea y muchas otras cosas maravillosas y fascinantes. Hay
que leer estas páginas como fueron escritas, con simplicidad, buena
disposición y honradez. Si uno quiere aprender tiene que abrir
no sólo la inteligencia sino también el corazón.
Grupo
B: Libros de Filosofía
El autor
divide la Filosofía en tres grandes ramas, según la clasificación
antigua. 1°: Cosmodicea, 2°: Andrología, y 3°: Filosofía
Rásica. Además, enumera diferentes disciplinas o escuelas
de pensamiento que han surgido en el transcurso del tiempo y que han llegado
hasta nosotros, como la Física, la Ética, etc. De la Filosofía
Rásica cita como único exponente moderno a H. P. Blavatsky,
y su libro universalmente conocido "La Doctrina Secreta". Y
agrega: "Para conocer la verdadera Historia... es indispensable verla
en el Registro del Séptimo Plano del Mundo Mental". El Maestro
Santiago la veía a voluntad, y muchas Enseñanzas de esta
Colección proceden de dichos Anales.
Tres libros forman el grupo de Filosofía:
Libro XIII: Filosofía.
Libro XXV: Teología.
Libro XXVII: Cosmogonía.
Los tres están muy relacionados entre sí, y explican la
evolución del pensamiento humano a través del tiempo, al
pasar por diferentes civilizaciones.
Sobre Cosmogonía, el autor es muy cauto. Dice: "La Cosmogonía
como estudio, como "reglas", didácticamente hablando,
es una mera especulación". Pero aporta un material que no
se encuentra en ninguna parte. Dice: "En el Templo de Ahehia, en
Kaor, sobre la negra y cónica piedra que cierra el sepulcro de
la Divina Madre Hes, está escrita la Historia del Universo en místicos
signos". A continuación los transcribe, y en las Enseñanzas
siguientes los desarrolla y explica.
El Maestro Santiago pone a la Teología en la cumbre de la Filosofía,
y aún de todo conocimiento humano. Y en el Capítulo 13 habla
de una Gran Revelación única, dada en los albores de la
Raza Aria por el Manú, de la cual devienen las revelaciones de
todas las Religiones. Y asegura que aún puede ser descubierta en
algún lugar oculto de la Tierra. Afirma: "No terminará
la presente Raza Raíz sin que sea descubierta, para que todas las
revelaciones vuelvan a la unidad".
Grupo
C: Libros Doctrinarios
El caudal de esta sección es inmenso: 170 Enseñanzas de
la más variada naturaleza que corresponden principalmente a las
llamadas "Enseñanzas de Cafh", inspiradas astralmente
por el Celador, y recogidas por el Maestro Santiago. Como un inmenso río,
un Amazonas grandioso, recoge afluentes que vienen de las altas cumbres
de América, y se unen al río madre para volcar sus aguas
en el Océano de la Humanidad.
Está constituido por once libros:
Libro I: Desenvolvimiento Espiritual.
Libro II: El Sacrificio.
Libro XI: Vida Interior.
Libro XII: Vida Espiritual de Cafh.
Libro XVIII: El Camino de la Renuncia.
Libro XIX: Los Mensajes.
Libro XXVIII: La Renuncia.
Libro XXXI: El Buen Camino.
Libro XXXIV: Comentarios al Reglamento de Cafh.
Libro XXXV: La Renuncia en el Mundo.
Libro XXXVII: Ceremoniales, Oraciones e Himnos.
Es imposible, en el breve espacio de estos comentarios, intentar una aproximación
a la vastedad de estos Cursos, no sólo por el volumen de sus páginas,
sino por las dificultades internas de sus conceptos. Este es el núcleo
de la Doctrina de la Renuncia, desarrollada en todas sus formas y con
implicaciones y contactos con los demás aspectos del saber humano.
Vayan estas líneas como una presentación sugestiva para
estimular su lectura y estudio. En comentarios posteriores nos dedicaremos
a tratar cada Enseñanza en particular a medida que vayan apareciendo
las motivaciones pertinentes. Hay, incluso, párrafos de dos líneas,
o un término concreto que requieren una ampliación didáctica
conectada con otros textos.
Grupo
D: Libros Ascéticos Místicos
Son siete
libros, y se ocupan de la oración en todas sus formas, con el agregado
de los dos últimos sobre gimnasia y las posturas, que ayudan a
la oración.
Libro IX: La Ascética de la Oración.
Libro XIV: Ascética Mística.
Libro XV: La Meditación Afectiva.
Libro XXIX: La Meditación Discursiva.
Libro XXX: La Vocación Contemplativa.
Libro XXXII: La Gimnasia de Cafh.
Libro XXXIII: Las Posturas.
Santiago Bovisio enseñó a meditar a miles de personas que
no tenían la menor noción de lo que es la oración.
En un medio cultural como la Argentina, con sus costumbres todavía
coloniales de la primera mitad del siglo, la oración era sólo
la plegaria cristiana; no había ninguna institución independiente
que enseñara la meditación. Actualmente han cambiado un
poco las cosas con las prácticas de la Yoga de la India, muy deformadas
y sin mayores vuelos.
En estas Enseñanzas se conocerán las más profundas
técnicas de los ejercicios de meditación, de concentración,
de contemplación, discursivas, sensitivas, intelectual, afectivas,
de quietud, simple, con posturas y gimnasias apropiadas, en los más
diversos temas que vienen de la Simbología Antigua. Enseña
a distinguir los efectos reales en los ejercicios de los efectos autosugestivos;
advierte sobre las desviaciones místicas y sus peligros, etc. Constituye
un tratado completo de la Oración al máximo nivel místico
que se puede consultar en estos tiempos. Rechaza firmemente toda práctica
ascética que procure psiquismo, poder mental y acrecentamiento
de las energías magnéticas dañinas al alma. Finalmente,
exalta los ejercicios ascéticos místicos sin logro desde
el comienzo del sendero, que vacía al alma de los apegos materiales.
Grupo
E: Libros Esotéricos
Ya hemos
dicho más arriba que Santiago Bovisio era un ser con extraordinarias
facultades parapsicológicas, que estaban en él desde su
nacimiento. Tuvo la suerte de educarse en una familia comprensiva y cariñosa,
en un ambiente de piedad cristiana, y ya en la escuela, en un Instituto
Pasionista que le brindó apoyo y comprensión en la difícil
etapa de la adolescencia. Todas las propuestas culminaron con el ingreso
en la Orden del Fuego, en Venecia, con los mejores maestros del mundo
y con archivos de sabiduría como no había otro en Europa.
A los 21 años ya estaba formado, hizo la consagración de
los Votos Perpetuos, y partió en misión para América
donde realizaría su gigantesca obra. Habitaba, se movía,
hablaba en dos mundos diferentes (para nosotros) al mismo tiempo con toda
comodidad, que para él eran uno sólo unificado: el astral
y el físico. Así era el mundo Atlante antes de perder el
ojo pineal, y así serán los hombres futuros cuando lo recuperen.
En estos libros esotéricos el lector podrá acercarse a las
experiencias suprafísicas de alguien que las vivía cotidianamente,
incluso en el fárrago de la ruidosa Buenos Aires. Podrá
aceptarlas o rechazarlas, como quiera, pero no dejará de admirarse
ante el maravilloso universo que no se ve, pero que actúa en nosotros
continuamente.
Hay en esta sección libros de simbología antigua que ayudan
a meditar, otros sobre las peripecias del ser en el mundo intermedio desde
que muere hasta que vuelve a nacer, por lo general unos 600 años
después del fallecimiento, uno sobre los colores astrales y sus
significados, y uno más sobre los Planetas, cómo se formaron
y cómo morirán.
Esta parte consta de cinco libros:
Libro III: Simbología Arcaica.
Libro VII: El Devenir.
Libro VIII: Ciencia de la Vida.
Libro X: El Aura Astral.
Libro XVII: El Sistema Planetario.
Hoy las librerías están repletas de libros esotéricos
de autores que jamás vieron nada, pero copiaron mucho. También
abundan las agrupaciones esotéricas que practican ejercicios y
organizan excursiones a lugares mágicos. En tiempos de inquietud
y miedo, las masas de las grandes ciudades se refugian en la oscuridad
de fuerzas que no comprenden, desde la violencia de los estadios, el escape
de las drogas y el sexo, hasta la aberración psíquica de
prácticas mágicas desconocidas que las enajena.
La ciencia esotérica es luminosa, esclarecedora, curativa, y la
radiación astral es pura radiación, luminosidad brillante
donde habitan y trabajan nuestros protectores invisibles para que nosotros
también seamos buenos. Para acercarse a esta ciencia y a estos
conocimientos hay que vaciar el corazón de toda mancha, porque
la luz las repele. Al leer estas páginas, el lector se pondrá
en contacto con un Maestro de Sabiduría que escribía estas
cosas con el corazón.
Grupo
F: Libros sobre las Comunidades
Libro XX:
Superiores de Comunidad.
Libro XXI: Intimidad de los Perfectos.
Libro XXII: Interpretación para Ordenados de Comunidad.
Libro XXXVI: Conferencias de Embalse.
Como estamos en Argentina, en tiempos modernos, nada mejor para acercarse
a estas experiencias que viven los jóvenes que introducirse en
la lectura de las Conferencias de Embalse. En Embalse del Río III,
Córdoba, junto al lago Calamuchita, está la primera Comunidad
de mujeres que fundó el Maestro Santiago, con muchísimos
sacrificios. Se dedicaban particularmente a la educación de niños
pobres que les mandaba el Patronato de Menores. Muchas de estas Conferencias
se refieren a la educación de los niños. Pero el objetivo
central es la perfección en la vida de Renuncia, como se lee en
estos Cursos. Eran mujeres muy jóvenes que habían elegido
esa forma de vivir. En la Observancia al Reglamento se ve que los días
sábado, a la tarde y antes de la cena, se dictaba una Conferencia
de aproximadamente una media hora, en la Capilla. Cuando el Maestro Santiago
estaba en la Comunidad, no sólo la dirigía personalmente,
sino que dictaba las Conferencias
La temática de las Conferencias era variadísima, y trata
todos los asuntos importantes que han surgido en la Vida de Comunidad.
Es como acercarse un poco a las almas consagradas. La intimidad de esa
vida es inaccesible al extraño, aunque estuviera presente, pero
en las Enseñanzas del Fundador queda como el eco de una música
maravillosa, como el perfume de una flor que ya no está, como la
esperanza de un mundo mejor. Ahora, esa Esperanza, por medio de estas
Enseñanzas Magistrales, forma parte del Cuerpo Místico de
la Humanidad.
Capítulo
3: Himno al Maitreya
Amado Maitreya:
habítanos.
Revélanos el misterio del amor.
Soledad inconmensurable del que sin ser humano vive entre los hombres.
Y se hace hombre en el más puro, insondable acto y sacrificio de
amor.
Pureza, luz eterna de un amor sin mancha.
Sólo, y a su vez uno con las almas.
Te llamamos a las puertas del Divino Santuario.
Te glorificamos para ser elevados al Amor.
Te adoramos en el fondo más profundo de nuestro corazón.
Húndenos más y más en el centro del corazón,
hasta dejar de ser un hombre aislado y perdido.
Dejar de ser una ilusión.
Pongo en tus manos divinas mi pequeño corazón.
Dejarse caer en el interior de esa cámara secretísima, donde
todo es quietud, sosiego y calma.
Donde el corazón se trueca por el corazón de la Divina Madre.
Que este pecho albergue al Divino Corazón, infinito, eterno.
Enséñanos a no querer más.
A no sentir más.
A no ser más.
Que no haya ni una mirada hacia uno mismo.
Ni un gesto de uno mismo.
Ni un sentir de uno mismo.
Que ese uno mismo no calcule más.
No ser nada.
Misterio divino.
Quítanos esta conciencia que nos mantiene separados.
Transpórtanos al Reino del Uno, Eterno, Infinito Ser.
Ver sólo la luz inmutable.
Si nuestra mirada se quedara allí, quieta, sería yo la Eternidad.
Que lo único que quede en el alma sea sólo herramienta para
tu Obra.
Que cada instante de vida sea para llamarte, conocerte, adorarte.
Haciendo de nuestra ofrenda diaria holocausto perfecto.
Que para mirar hacia la luz sea más luz para los que están
solos y desamparados.
Que por vivir en el Amor, el corazón sin movimientos sea albergue
y templo para el que busca amar.
Llamar almas, albergar almas.
Y todos unos recorrer el camino hacia la luz.
Revélate, y el amor de las almas Revelarás, Crecerá,
y se Expandirá.
¿Dónde estás?
En el centro más íntimo y secreto de cada Corazón.
Oculto, cuando uno sigue siendo un pequeño corazón.
Luminoso, cuando se renuncia a ser, dejando lugar al Divino Corazón.
Más, ven a tus almas ya.
Haz de nosotros granitos de ese puente que tiendes entre el Cielo y la
Tierra.
Sumergiéndonos en la infinitud de tu Conciencia Divina.
Toma todo lo que soy para no ser.
Sólo la Chispa Divina, Eterna, sea Tú mismo
Enséñanos a llevar todo hacia la Unidad Eterna.
Al Reino de lo Inefable.
Enséñanos a descubrirte en el más profundo centro
del corazón.
Donde cabe todo.
Romper el corazón del hombre, fundirlo en el fuego divino para
que se revele el corazón eterno de la Divina Madre.
Ser Tú mismo.
Así una vida será Vida.
Expansión que penetra en el ser de todas las cosas
Enciende nuestra vocación con el fuego de tu Amor por las almas.
Hazla amar hasta la muerte.
Y querer para sí el holocausto total que Tu alma enseña.
Tómame todo.
Que si una infinitésima gota quedara guardada, hiere y es muerte.
Ser Tu mismo.
Recíbenos al centro invariable.
Vernos todos en uno.
Allí cada alma lleva a las almas. Cada corazón cabe en el
Único Corazón.
Ahehia ote Hes.
Eret Hes ote Ahehia.
Capítulo
4: Comentarios sobre el Maitreya
1. El Maitreya
Por los años
1972-77 es esperado sobre la tierra la nueva Divina Encarnación
de cuarta categoría.
Los estudiantes espirituales, en el deseo de saber algo de su vida, de
su misión y de su futura obra, se dejaron llevar por el entusiasmo
y han escrito sobre Él, cantando su poder, embelleciendo su obra
y dando brillo real a todos los contornos de su existencia.
Pero su futuro permanece oculto en el misterio del porvenir.
Es probable que la realidad sea muy distinta de lo soñado, y que
Él sea un varón humilde que pasa inadvertido por su aparente
insignificancia entre la multitud, pues seguramente ha de ser heredero
de Aquél que dijo: "Mi delicia es vivir entre los hijos de
los hombres".
Lo que importa conocer de antemano, a grandes rasgos, es la forma que
llegará a la Humanidad, la misión que tendrá que
desarrollar entre los hombres, y qué nuevo sentido de la vida donará
a estos.
Evidentemente, la Humanidad ha salido del oscurantismo, los hombres saben
leer, tienen aspiraciones sociales y determinan sus vidas, de cierto modo.
Cuando se encuentran solos, piensan a su manera y sienten de un modo propio
y personal, si bien la Humanidad sigue aún el instinto colectivo
de las masas.
La agonía de la hora actual es ésta: vislumbrar y no ver,
querer y no poder, salir fuera de los velos de la ignorancia para sentir
sobre sí el peso de la incomprensión, y es éste un
martirio más interior que exterior. Las grandes ruinas externas
son, en realidad, el resultado de esta lucha interior.
El hombre de antes podía vivir relativamente tranquilo porque no
sabía nada y era dirigido; en cambio, el hombre actual, al saber
tan sólo un poco, este saber es para él su mayor enemigo
y tormento.
El Maitreya viene a la Humanidad para provocar la solución de este
vital problema de la raza. ¡Cuán difícil es su misión!
¿Para ser feliz, el hombre ha de vivir identificado con la colectividad,
o encerrado dentro de sí mismo, como si nadie existiera fuera de
él?
¿Será la misión que trae el gran Ser la de amasar
su carne con su espíritu y hacer así un nuevo pan para satisfacer
al hombre?
¿Juntará tanto de carne, tanto de mente, tanto de espíritu
para dar con la armonía una solución para los grandes problemas
actuales?
¿Enseñará la necesidad de aniquilar completamente
la voluntad, o rebelarse a todos y a todo, siguiendo solamente el impulso
personal para ser feliz?
Esperan los hombres de buena voluntad, los discípulos fieles, los
Iniciados del Fuego, silenciosos, de rodillas, humildemente, limpio el
corazón y la mente sosegada, su Enseñanza, su contestación,
su admirable verbo. (del Libro V: "Grandes Iniciados de la Raza Aria",
Capítulo 16).
2.
Iniciados Solares de Cuarta Categoría
Los Iniciados
Solares de Cuarta Categoría aparecen sobre la tierra siete veces
en el transcurso de cada subraza, para facilitar la labor de adelanto
espiritual de la Humanidad.
Los pueblos de todos los tiempos presentan como prototipo de su raza a
uno de Ellos, el cual, viviendo dentro de las condiciones de las ideas
de su pueblo, procura renovarlas y vigorizarlas de tal forma que deja
una huella indeleble y un recuerdo divino de su obra, iniciando por sí
solo, una nueva era.
El Iniciado Solar de Cuarta Categoría se une estrechamente a los
hombres participando de sus vidas, y haciéndose carne en Él
los problemas de aquellos, de manera que Él mismo se transforma
en una imagen de sus problemas. Él, Dios, al procurar solucionarlos
como parte de su misma carne y de su idiosincrasia humana, se transforma
en un Salvador de la Humanidad.
Es tan estrecha la unión del Dios-Hombre con los hombres, que en
muchos casos ha preponderado, aparentemente, su forma humana sobre la
divina. En Él, lo divino y lo humano están tan estrechamente
unidos, que siente los dolores de la humanidad de tal modo que, puede
decirse, el Iniciado Solar de Cuarta Categoría lleva en sí
todos los dolores de la humanidad; porque sólo un hombre perfecto,
por ser verdaderamente Dios y verdaderamente hombre, puede sentirlos y
padecerlos integralmente.
El trabajo de Ellos es recordar la Idea-Madre, vivificarla y renovarla,
quitando los escombros que el tiempo y la obra imperfecta de los hombres
han amontonado sobre ella. Su misión es la de crear una voluntad
individual de la Humanidad.
Muchas veces los Iniciados Solares de Cuarta Categoría han descendido
sobre la tierra. Siempre su venida fue sin semilla de karma personal o
universal, y su concepción ha sido verdaderamente virginal. Su
advenimiento ha sido preparado y profetizado por grandes Iniciados Lunares
y del Fuego. Además, una corte selecta de estos últimos,
los ha acompañado en vida, como parientes, discípulos, allegados
y Maestros.
El Iniciado Solar de Cuarta Categoría afirma su divina encarnación
durante su vida, con palabras inequívocas, con obras singulares,
con hechos milagrosos y profecías que se cumplen, delante de testigos
y en forma pública, de modo tal que su recuerdo entre los hombres
sea imperecedero.
Para que su obra evidencie verdaderamente su alta finalidad, testifican
con su sangre el recuerdo y la de su doctrina.
Después de su muerte, desintegran rápidamente su cuerpo.
Con ella todos los seres humanos y los que están en los planos
astrales, reciben una notable y benéfica influencia. A los cuarenta
días desintegran también sus cuerpos sutiles y se reintegran
al seno de la Divinidad.
Su misión sobre la tierra termina con su muerte; pero Ellos siguen
amparando espiritualmente a la Humanidad durante toda una subraza de familia,
la cual, por consiguiente, crea, sobre sus doctrinas, una religión.
Durante la actual subraza se recuerdan varios de estos Grandes Iniciados,
como ser: Krishna, Hermes, Buda y Cristo. (del Libro V: "Grandes
Iniciados de la Raza Aria", Capítulo 6).
3.
El Fuerte Libertador
Cafh espera
el próximo descenso de la Divina encarnación sobre la tierra.
El Fuerte Libertador, el Maitreya, el Cristo Glorioso, es la imagen del
Ser Divino esperado.
Muchos afirman que la Divina Encarnación en realidad no encarna
en un hombre, sino sólo anima una forma, o da impulso a un ser
escogido. La naturaleza del Dios-Hombre es sólo divina; su humanidad
no es más que un reflejo, una ilusión. Otros afirman que
la Divina Encarnación es un símbolo, una imagen del descenso
del espíritu a la materia y la elevación del mismo a su
prístino estado; una analogía divina que indica el nacimiento
de una fuerza espiritual en el alma, que es la manifestación trascendente
de Dios en el ser, ya que el alma puede salvarse por sí sola.
Otros más afirman que la Divina Encarnación está
real y esencialmente encarnada en el Hombre-Dios, y que su naturaleza
es humana y divina.
Los orientalistas dicen que la Divina Encarnación realmente humana
y divina, viene periódicamente sobre la tierra para salvar a la
humanidad.
Los cristianos dicen que la Divina Encarnación, realmente humana
y divina, encarna en el Dios-Hombre sobre la tierra para redimir a la
Humanidad, y que este acto divino, por ser integral y satisfactorio, no
puede ser repetido; es único.
Cafh tiene al respecto su propia opinión que se expondrá
aquí, pero que en última instancia deberá ser aclarada
individualmente por el Hijo a medida que se acentúa en él
la pureza interior y la claridad mental.
El ser tiene que lograr su liberación interior por su propio esfuerzo.
Pero esta humana voluntad pierde todo valor determinante cuando se desune
del fin común y único. El destino de perfección inherente
al alma es su participación a la conciencia cósmica.
Entonces el ser por sí solo logra la liberación porque determinadamente
se pone en contacto con las fuerzas de liberación cósmicas.
La liberación del ser es preestablecida por un acto puro de la
conciencia divina, y lograda por el ser mismo en sí, por un acto
voluntario de participación y esfuerzo. Es indispensable, entonces,
la participación de la Encarnación Divina para la salvación
de los seres y del ser.
Esta salvación, entonces, no se efectúa sólo individual
y parcialmente, sino es colectiva para todo el género humano, para
todas las fuerzas vivas de la tierra predestinadas, y al mismo tiempo
para cada ser de por sí.
Este proceso divino humano en bien de la redención total de los
seres, puede ser observado en el curso del desenvolvimiento de la raza
aria.
En los principios de la raza, la Revelación y la Tradición
expresaban únicamente un contacto del hombre con Dios a través
de la reverencia y la pleitesía. Dios impera constantemente en
el mundo y sobre el hombre, y el hombre a su vez tiene los ojos continuamente
elevados al cielo en busca del amparo de este Dios; pero no lo conoce
sino a través de las grandes manifestaciones de la naturaleza.
Como pasan los ciclos de vida, esta idea se hace más profunda en
el hombre, pero simultáneamente establece una valla infranqueable
entre Dios y el hombre.
Dos cosas completamente distintas: un Dios inmanente y un hombre creado.
Dos paralelas que se alejan cada vez más de su punto de partida,
y que ningún sistema filosófico ni imagen especulativa de
la mente llega a unir; es una separación infranqueable.
El alma pierde su potencial unitivo con Dios, y queda así inhibida
para los grandes vuelos frente a un gran vacío.
Dios sólo puede llenar ese vacío. Sólo Él
puede acercarse al hombre y atraerlo a Sí. Éste es un hecho
no sólo humano, sino racial y cósmico.
La Divina Encarnación es Dios mismo que toma forma humana para
llenar ese gran vacío.
Más, para que este descenso divino a la tierra sea tal, no puede
ser un hecho ideal, una irradiación, una imagen, una potencia directiva,
sino ha de ser un hecho real, efectivo, carnal. De no ser así no
llenaría su fin.
La idea del descenso divino a la tierra se hace sentir simultáneamente,
a un mismo tiempo, sobre toda ella.
La plasmación de la Idea Mesiánica lo impregna todo en un
mismo instante.
A la distancia del tiempo, esto se puede casi probar históricamente.
El acontecimiento de un Dios hecho hombre no está mencionado en
ninguna de las tradiciones más antiguas, especialmente, ni en las
védicas ni en las hinduistas.
La Revelación sólo establece las relaciones del hombre con
el Dios cósmico.
La Idea Mesiánica que se manifiesta en el mundo, antes del advenimiento
de Cristo, remonta a pocos siglos antes de su venida y aparece simultáneamente
en todas les religiones y en todos los pueblos.
La idea de la necesidad de un Mesías Redentor se plasma en la mente
del mundo. Osiris, el Dios protector de los muertos, se transforma en
Egipto en el Redentor, muerto, despedazado y vuelto a resucitar para bien
de los hombres.
En la India, el Divino Redentor Krishna encarna en la tierra, se hace
semejante a los hombres, participa de sus vidas y de sus males para poder
salvarlos. Krishna en ningún texto indo está mencionado
históricamente antes del período mesiánico.
Cristo, hasta los nombres son parecidos en su raíz, es el Dios-Hombre
que vive y muere para redimir a la Humanidad. La Divina Encarnación
del Iniciado Solar de Cuarta Categoría es un hecho divino y humano,
ideal y material, cósmico e individual.
El acto redentor, entonces, si es un hecho real, si es un acto divino
pleno, no puede ser repetido: es único. La Divina Encarnación
encarna periódicamente sobre la tierra; pero el acto crucial de
la redención de una raza sólo puede ser consumado una sola
vez.
La Divina Encarnación encarna entre los hombres y se pone en contacto
directo con ellos.
Vuelve en otra etapa y alumbra sus mentes; retorna otra vez e impregna
todo de su presencia.
Los hombres están idealmente predispuestos para la redención
por la influencia de las Divinas Encarnaciones que han encarnado en ellos,
pero la redención carnal efectiva sólo se consuma una sola
vez.
Cristo, con su participación humana a los dolores de la Humanidad,
en su Pasión los redime plenamente. Aún carnalmente.
Más la redención potencial de la Divina Encarnación
de Cristo ha de ser actualizada en cada ser. Cada hombre ha de transformarse
en otro Cristo, para hacer efectiva en él la Divina Redención.
Lo que fue hecho y abarcó toda la conciencia de la Humanidad lo
ha de repetir cada alma en sí con voluntad y esfuerzo.
El descenso de la Divina Encarnación a la tierra en la próxima
aparición, ha de lograr plenamente este fin.
El Fuerte Libertador ha de quebrar la puerta que separa al alma de la
divinidad, para que ésta logre una trascendencia divina.
Y este Divino, real, iniciático advenimiento es el esperado por
Cafh (del Libro XII: "Vida Espiritual de Cafh", Capítulo
13).
4.
Referencias Escritas en las Enseñanzas
Libro I "Desenvolvimiento
Espiritual" (1.14): En la generación actual no hay ningún
Iniciado Solar sobre la Tierra, pero sí algunos de sus discípulos
directos.
Libro I "Desenvolvimiento
Espiritual" (1.15): Uno ha aparecido o aparecerá entre los
hombres, por los años 1972-77, momento inicial de la época
del signo de Acuario o Hidrochosa.
Libro III
"Simbología Arcaica" (3.1): La Tierra está bajo
el signo zodiacal de los Peces y la Humanidad experimenta continuamente
su influjo; aún viven los hombres una era de par de opuestos, de
altos y bajos, de colectividades o personalidades absolutas, y, si bien
se vislumbra la nueva raza de Acuario, que empezará por los años
1972-77, todavía ella no se ha afirmado sobre la Tierra.
Libro III
"Simbología Arcaica" (3.2): Desde que el signo de Picis
empezó, el 28 de la Luna de Febrero es aquel que más magnetismo
descarga sobre el planeta por su conjunción zodiacal; por consiguiente,
este día es muy apropiado para empezar toda labor psíquica
y emprender estudios metafísicos que requieren cierto magnetismo
para colaborar con la voluntad humana.
Libro III
"Simbología Arcaica" (3.5): La nueva raza de Aquarius,
sin embargo, ya ha aparecido, con su nuevo signo, con su nueva personalidad
y mentalidad; indudablemente, la barca, el barquero y la tinaja de Aquarius
avanza con velocidad.
Libro XII
"Vida Espiritual de Cafh" (1.18): El planeta y los hombres están
impregnados de la gracia y de la protección de la Divina Encarnación
del Gran Iniciado Solar. Éste, al cual llamamos el Cristo, ha intervenido
directamente en la redención y posibilidad de adelanto de la Humanidad
actual.
Libro XII
"Vida Espiritual de Cafh" (1.19): Como una nueva raza está
por empezar, la Divina Encarnación volverá sobre la tierra
para renovar y fortalecer la obra de Cristo.
Libro XII
"Vida Espiritual de Cafh" (1.20): Los discípulos orientales
llaman a este Gran iniciado Solar: Maitreya. Cristo anunció claramente
en los Evangelios su regreso triunfal a este mundo.
Libro XII
"Vida Espiritual de Cafh" (7.27): Los Grandes Iniciados Solares
de la Cuarta Categoría, cuando la oscuridad es más profunda
sobre el mundo, vienen a vivir entre la humanidad, para restituirle el
sentido de su origen divino y sobrenatural, y ayudarle a cruzar el gran
puente de la razón, para que circule libremente de la tierra al
cielo. Pero no basta este auxilio. Para que el poder humano se transforme
en divino, es necesario una unión substancial de los dos elementos,
humano y divino. Es necesario entonces que la misma divinidad nazca y
viva en él, se injerte en él, se haga su propia vida, para
que al fin se constituya la Idea Madre de la Raza: el logro del Hombre-Dios.
Libro XII
"Vida Espiritual de Cafh" (7.28): Ésta, "1945",
es la hora de tal divino alumbramiento.
Libro XVIII
"El Camino de la Renuncia" (13.16): Los Hijos son sus discípulos;
lo han dejado todo para ser corredentores con la Divina Encarnación,
con el Maitreya que vendrá.
Libro XVIII
"El Camino de la Renuncia" (15.18): Desde allí sean los
verdaderos corredentores de la Humanidad junto al Gran Salvador, y desde
allí pueden atreverse a mirar el porvenir, tan desconocido para
los hombres, pero que adquiere una claridad inmensa a los ojos de aquel
que ya no tiene ojos para ver este mundo.
Libro XVIII
"El Camino de la Renuncia" (15.19): En verdad, los Hijos de
la Renuncia, llamados a esta tierra únicamente para cumplir su
misión de muerte mística, han sido enviados a preparar los
caminos del Gran Salvador en una hora terrible y difícil para la
humanidad. Desde ese año de 1945, desde ese 16 de junio todos los
hombres que quedaron de pie estaban destinados para ver el principio de
la nueva raza. Ese día prepararon allí, en ese desierto
americano, la primera bomba atómica cuya energía se levantó
a los ojos de los hombres como un monstruo desconocido, avasallador, que
paralizaba todos los sentidos. Desde ese momento se ha entrado en la nueva
era.
Libro XVII
"El Camino de la Renuncia" (15.30): ...y no sólo esto
lo sostiene, sino el Amor Divino del Maitreya. Por mucho que se haga,
nada servirá sin que Él venga a la tierra.
Libro XVIII
"El Camino de la Renuncia" (15.31): Pidan los Hijos para que
Él venga a poner Su Mano para que la destrucción inevitable
no sea tan tremenda. Pidan para que sean muchos los seres que puedan salvarse.
Libro XIX
"Los Mensajes" (9.14): Un número grande de seres y de
Iniciados están por venir sobre la Tierra acompañando al
Divino Redentor.
Libro XXXVI
"Conferencias de Embalse" (11.8): Levántese, Hija, y
venga a desposarse con la Divina Encarnación, con el Gran Maitreya.
Libro XXXVI
"Conferencias de Embalse" (28.3): Creo que esto es lo que enseñará
el Maitreya, la nueva expresión de la Encarnación Divina:
la forma, la manera en que debemos convertirnos en Cristos pequeños,
en pequeños holocaustos, en pequeñas hostias.
Libro XXXVI
"Conferencias de Embalse" (28.4): Somos los precursores del
Maitreya.
Capítulo
5: El Escenario para el Redentor
1. El Mundo
del Tercer Milenio
En los comentarios
anteriores hemos presentado a los dos protagonistas centrales de esta
maravillosa aventura espiritual: el Maestro Santiago Bovisio y el Redentor
Maitreya.
Del Maestro Santiago, aparte de la trascripción de todas sus Enseñanzas
escritas, que forman el cuerpo de esta obra editorial en Internet, hemos
comentado las circunstancias y las relaciones de unas con otras, para
colaborar en la comprensión de las mismas. Las Enseñanzas
son del siglo pasado, y desde la muerte de su autor en 1962 han pasado
casi 40 años; mucho tiempo para esta época vertiginosa.
Del Redentor hemos reunido todas las referencias que aparecen dispersas
en las Enseñanzas, unas en forma concreta, otras ocasionalmente,
de manera que el lector tiene organizada y reunida la temática
directa del Maitreya. Además, hemos comentado diversos temas relacionados
directamente con su aparición: lugares, mensajes, discípulos,
asuntos que aparecen en las Enseñanzas y en otras partes alejadas
de otras épocas.
El objetivo central de este grupo de comentarios es actualizar el material
doctrinario a nuestro tiempo. Los escritos de Santiago Bovisio son del
siglo pasado, cuando todavía regía plenamente la anterior
subraza, en otros escenarios ideológicos y culturales, diferentes
a los actuales. Del Maitreya no se puede decir nada de esa época,
salvo las profecías, porque todavía no había aparecido.
Nuestro trabajo en esta ocasión es dibujar el escenario de la realidad
viviente, dispersa, oscura, contradictoria, peligrosa, en una forma clara
y comprensible, y ubicar a nuestros dos héroes actuando en el destino
de los hombres: uno como Profeta y Precursor; el otro como Redentor de
la Humanidad promoviendo el cambio de la Raza.
2.
La Época
La época
histórica que desarrolló las ideas que gobiernan los temas
de nuestros comentarios es la inmediatamente anterior a nuestro tiempo:
siglos XIX y XX. Estos doscientos años que se inician con una ruptura
total de las tradiciones medioevales producida por la Revolución
Francesa y la industrialización, manifestó una unidad cultural
y política notable, destacándose la ocupación y explotación
de todas las regiones del Planeta, terrestre, marítima y espacial,
los viajes, las comunicaciones y las guerras, el desarrollo espectacular
de las ciencias y la tecnología, la educación universal,
la energía atómica, la modificación de las especies,
la masificación de la sociedad, el derrumbe de las religiones,
y otros temas de vital importancia. Indudablemente, fue un mundo nuevo
y lo sigue siendo en gran medida.
Si una de las tareas de esos dos siglos fue el desenvolvimiento del racionalismo
hasta sus más audaces consecuencias, independiente de la autoridad
tradicional, lo ha logrado plenamente. La investigación y aplicación
de los mecanismos de la actividad cerebral ya está en uso en las
computadoras, aunque los usuarios no sepan ni entiendan esos mecanismos;
simplemente los usan porque los han hecho fáciles hasta lo elemental
para ponerlos en marcha. Los avances tecnológicos son espectaculares
pero los hombres, interiormente, siguen viviendo en la Edad Media.
De igual manera, las demás conquistas de la ciencia manifiestan
un desmesurado crecimiento en sólo un aspecto, generalmente vinculado
con el poder del dinero, en detrimento del bienestar general, la armonía
de los valores y la felicidad de las personas. El crecimiento espectacular
de la riqueza de unas pocas naciones y personas es el fruto de la explotación
de la mayoría sin poder. Una situación de esta naturaleza
nunca se ha visto en la Historia en tal magnitud: miles de millones de
seres humanos sin destino condenados a la extinción, a causa de
unos pocos que disfrutan de un esplendor como nunca, tampoco, se había
conocido.
El Maestro Santiago y el Redentor se presentan en este escenario inaudito
pero real: una civilización repleta de conquistas y avances haciendo
equilibrio junto al abismo de la destrucción, cada día más
amenazante. ¿Cómo jugarán sus fuerzas espirituales
que trascienden las dimensiones para salvar al hombre y llevarlo a la
conciliación de los contrarios? Ésta es la audaz intención
de nuestro trabajo; por una parte el legado inmortal de un Maestro de
Sabiduría y sus Enseñanzas de la Renuncia, anunciando al
Salvador del Mundo, que ya está aquí, pero permanece desconocido,
y por otra parte el escenario sangriento de la civilización racional
en sus postreros momentos.
3.
Escenografía Conceptual
Para comprender
el rol que juegan nuestros dos personajes que protagonizan las Enseñanzas
y nuestros comentarios, necesitamos dibujar una escenografía de
conceptos, informaciones, hechos históricos y sociales del tiempo
en que el autor de las Enseñanzas se desenvolvía en un medio
cultural concreto y definitorio: la Segunda Guerra Mundial. Como las fuerzas
históricas que produjeron este fenómeno planetario se remontan
hasta el siglo XIX, y se prolongan hasta nuestros días, necesitamos
un escenario globalizador que lo comprenda todo. Haremos sólo un
esbozo, un croquis de este espacio, lo indispensable para poder ubicar
y dejar mover a los protagonistas. Ellos por sí mismos dirán
lo que tienen que decir. Del Maestro Santiago tenemos el libreto completo
pues lo escribió con su mano; pero debemos comprenderlo con el
estudio. Del Maitreya es todo expectativa, y no sabemos cuándo
conoceremos su palabra. En esta ecuación con una incógnita
Divina, la meditación y el tiempo nos aproximarán al misterio
del futuro de la raza humana.
Entonces proponemos armar la escenografía prometida utilizando
los siguientes materiales:
1. El poder del dinero.
2. La destrucción atómica.
3. Devastaciones ambientales.
4. Desviaciones genéticas.
5. Droga, sexo y epidemias.
6. Supervivencia.
En la medida que el drama de cada día vaya modificando nuestras
propuestas, agregaremos nuevos elementos de trabajo.
4.
El Poder del Dinero
Hay una enseñanza
en esta colección que puede servir de introducción preparatoria
para el comentario que iniciamos sobre el poder del dinero: "Los
bienes de la Renuncia", y es la décima del curso "El
Camino de la Renuncia". Considera las relaciones del Renunciamiento
con el afán de posesiones, y recurre a numerosos ejemplos para
explicar estos vínculos: los Evangelios, Gandhi, los judíos,
la Iglesia Católica, y otros. Su postura en este asunto, como la
de Jesús, es terminante. Y aunque esta Enseñanza estaba
dirigida a discípulos con Votos de Renuncia, los conceptos y las
relaciones vida-dinero que sostiene son válidas para todo el mundo.
El afán de posesiones es inherente a la baja naturaleza humana
como una forma del instinto de conservación, de seguridad personal,
de desconfianza frente a los otros. Se ha manifestado en todos los tiempos,
provocando luchas y guerras entre los pueblos. Muchos creen que poseer
brinda seguridad y bienestar, todo lo contrario de lo que afirman los
santos: "Ganar es perder", "Que no acumulen lo que tienen
que repartir entre los pobres".
Pero en los últimos dos siglos esta ansia de posesiones ha llegado
a límites aberrantes y destructivos, por abuso de la acumulación
de dinero. Con el incremento de las actividades lucrativas que se desarrollaron
con la revolución industrial, la acumulación de capital
para los grandes proyectos de producción (armamentos, comunicaciones,
minería, nuevas ciudades, tráfico de drogas, etc.) el dinero
se independizó de sus funciones primarias, y se transformó
en un fin por sí mismo, en un poder autónomo. Se hizo intangible,
virtual, omnipotente. Ese poder del dinero creó a su vez los instrumentos
de presión para perpetuarse y aumentar, porque lo único
que puede hacer es crecer y dominar. Esos instrumentos de dominación
actualmente se llaman "globalización planetaria".
En las Enseñanzas del Maestro Santiago sus afirmaciones son universales
y valen para lo grande como para lo pequeño. Lo que afirma sobre
el poder aplastante de las posesiones en las instituciones religiosas
y el daño que producen, se aplica para cada individuo particular.
Para el Maestro no hay dos leyes, una para los poderosos, ricos y dominantes,
y otra para los desprotegidos. La ley espiritual es una sola y sus efectos,
benéficos o perjudiciales, se aplican rigurosamente a los grandes
y a los chicos. Igualmente, no hace diferencia entre laicos y sacerdotes,
padres de familia y monjes, patrones y obreros. Esto no significa monotonía
social ni igualdad económica para todos, como han pretendido algunas
ideologías que ya no funcionan. La ley espiritual propicia el uso
equitativo de la riqueza según la necesidad de cada uno, y no el
exceso que siempre va en detrimento de otros. El Maestro defendía
la idea del Gran Almacén Inca como el mejor instrumento social
público para practicar la justicia social, y corregir las dificultades
que por diversas causas se presentan continuamente en las naciones.
Las opresiones y las desigualdades sociales, tanto en los pueblos como
en los individuos, son un resultado del ansia de poseer desmesuradamente
con injusticia. Los problemas de la Humanidad se generan en el interior
de las personas, y después se transfieren al exterior. Esforzarse
en resolver los conflictos económicos por medio de la economía
es estúpido, y nunca produce resultados positivos; tal vez con
suerte se alcance una transferencia hacia otros sectores. Y así
se repiten los ciclos de promesas y desilusiones. Los problemas económicos
no los resuelve el político ni en Ministro de Economía,
sino el educador, un maestro capaz de desarraigar el afán de posesiones.
Como el Maestro Santiago y sus Enseñanzas, como el Maitreya que
impulsará a los hombres hacia los nuevos caminos de la Renuncia.
En el escenario del mundo habría que imaginar esas columnas y perfiles
estadísticos que dibujan los economistas, en gran escala, como
si fueran los edificios de Nueva York, con los anuncios en el cielo sobre
la actualidad: China crece a un promedio de 10 %; la Bolsa cayó
en todas partes; la mitad del mundo vive en estado de pobreza; el asalto
del siglo a un banco; la lista de los hombres más ricos del Planeta;
etcétera. Y caminando por las calles, silencioso, solitario, el
Redentor del Mundo pensando y construyendo su Mensaje de Salvación.
Pero el Maitreya no ha venido para corregir los defectos de la economía
mundial, fruto de la codicia y el egoísmo del hombre viejo; ha
venido a cambiar la raza humana dándole otros objetivos y otros
horizontes. Todas esas calamidades de un poder desaforado del dinero ya
están sentenciadas a la desaparición, junto con las sociedades
y los mercaderes que las produjeron. ¿Se puede hacer algo positivo
con el actual estado psíquico de los hombres embrutecidos por la
locura del dinero? Esta mentalidad que inunda todos los estamentos sociales,
desde el poderoso hombre de negocios hasta el vendedor callejero, no tiene
corrección, salvo la muerte. Repetimos, están condenados
por sus propias acciones; seguirán fatalmente los impulsos de su
karma, como ya está ocurriendo, hasta el final.
En la Guerra de los 1500 años entre los Atlantes y los Arios, poco
pudieron hacer los cientos de Iniciados del Fuego que encarnaron para
ayudar a los Arios; el inmenso poder psíquico de los Atlantes y
sus armas letales animadas por poder magnético, no podían
ser modificadas con palabras ni buenas intenciones; sólo cuando
se produjo un cambio substancial en el magnetismo terrestre, los Atlantes
fueron derribados y aniquilados. Y se empezó de nuevo con hombres
que eran páginas en blanco. (Más adelante, cuando toquemos
el tema de la destrucción atómica volveremos a los Atlantes).
En las actuales condiciones de la civilización planetaria, con
sus gigantescas obras de todo tipo, todas colgando de un único
factor, el poder del dinero, y ese poder enquistado en el cerebro de cada
uno de los habitantes del planeta, las posibilidades de una reforma pacífica
son remotas. El mundo del dinero absolutista terminará quemado
en sus propias e irreprimibles contradicciones.
En este escenario están las Enseñanzas; pero no se ocupan
del dinero, sino de los enfermos morales por el ansia de posesión.
El karma que genera esta ansiedad es universal porque todos participan
de sus efectos, buenos o malos; para liberarse de estas consecuencias
hay que actuar individualmente en el desapego interior de las posesiones.
En la interioridad del alma hay que aplicar las Enseñanzas de la
Renuncia. Van a la raíz del mal, a la causa original de los problemas,
y sanan definitivamente si el enfermo quiere sanarse de verdad. El remedio
es renunciar a tener más de lo que naturalmente necesita.
Éstas y las demás Enseñanzas no constituyen programas
de acción colectivas, sino un esclarecimiento de la conciencia
individual; ni siquiera piden que se pongan en práctica; están
para ser estudiadas y meditadas, y luego, cada uno decide por sí
mismo. No se ocupan de los sistemas de la sociedad, ni se definen por
ningún bando; simplemente iluminan las cosas a la luz de la Ley
de la Renuncia. Las acciones nacen de la voluntad de cada uno libremente.
5.
La Destrucción Atómica
Una de las
visiones más impactantes del Maestro Bovisio es la que profetiza
el destino de las dos superpotencias, Estados Unidos y Rusia. Está
en la Enseñanza "La Renuncia Permanente", del libro "El
Camino de la Renuncia". Dice: "Recuerden los Hijos la visión
del león y el oso. Sobre una meseta, al borde de un abismo, una
gran leona estaba frente a un oso de tamaño enorme, y con artes
femeninas (diplomacia) procuraba atraerlo. Cuando ya lo tenía casi
ganado procuró herirlo en el cuello, y al no lograrlo, intentó
hacerlo en el vientre. El oso, al sentirse rozar se dio cuenta, y con
sus potentes garras destruyó el pescuezo de la leona; pero fue
tanta la violencia del golpe, que ambos cayeron al profundo abismo; las
dos grandes potencias serán destruidas. Pero una parte del mundo
se salvará".
La Subraza Ario Teutónica se inició hace 25.000 años
con la guerra de los 1.500 años, en la cual fueron destruidos completamente
los últimos Atlantes. Ahora finaliza su ciclo con una guerra atómica
que según el Maestro Santiago durará 30 minutos, el tiempo
necesario para que los misiles lleguen a destino.
Vamos a considerar ahora en este comentario el tema de la destrucción,
según los conceptos expresados en muchas Enseñanzas y como
aclaración de las mismas, y el papel del Redentor en la salvación
de la Humanidad.
Durante el medio siglo de confrontación rusa norteamericana, con
todas sus peripecias, la filosofía atómica fue la disuasión;
para ello, desplegaron al absurdo la estrategia del Over Kill, la súper
muerte. En el informe del doble premio Nóbel, Linus Pauling, de
1964, publicado por la UNESCO, estima que el potencial atómico
era de 320.000 megatones, lo suficiente para destruir varias veces a la
humanidad. Con el tiempo, y la aplicación de tratados de reducción
de misiles, la cantidad ha bajado, pero en contrapartida otras naciones,
como China, se ha sumado al siniestro club. La disolución de la
Unión Soviética hizo pensar a muchos que Rusia estaba en
decadencia militar. Nada más alejado de la realidad; su poder es
mayor que nunca, y está preparado y modernizado. Incluso, aunque
ya no se habla de disuasión, con la puesta en marcha de los nuevos
programas de defensa norteamericanos, Rusia ha endurecido su concepto
de disuasión y lo ha declarado públicamente: "Si Rusia
es atacada la respuesta será instantánea y total: un único
ataque con todo el potencial". (Putin a los periodistas norteamericanos
en la Biblioteca del Kremlin, después de la reunión con
Bush en Eslovenia).
Frente a estas horribles premoniciones, la primera pregunta que surge
en nuestra conciencia es: ¿Por qué tanta destrucción?
Y la respuesta obligada es: No se puede construir nada bienhechor sobre
las formas corruptas de la vieja civilización que se está
descomponiendo masivamente. Obsérvense los grandes fenómenos
sociales que están aniquilando a los pueblos de todo el planeta,
el sida, la devastación ecológica, la pobreza extrema, las
drogas, las deformaciones sexuales, etc. Y se comprenderá que una
guerra de holocausto es el fin inexorable de la destrucción existente.
Así como el poder atómico, desde sus comienzos se presentó
como una fuerza independiente que sólo sigue su lógica interna,
así la devastación de la civilización sigue su propia
lógica de derrumbe final como un organismo que cumplió su
ciclo y termina. ¿Es una fatalidad absoluta? No; son muchas las
señales que indican las Enseñanzas para que trabajemos junto
al Maitreya y colaboremos en las tareas de redención para que la
destrucción no sea tan grande y muchos puedan salvarse.
El lector debe tener bien presente que las tareas y los instrumentos que
un Maestro Espiritual pone en manos de los hombres son siempre interiores,
del alma, y no operativos externos. La amenaza de la destrucción
atómica no va a ser superada por Ángeles Celestiales armados
de trompetas y espadas flamígeras como aparecen en los mitos antiguos.
No; los hombres, si quieren salvarse tienen que renunciar a sus apegos
materiales como siempre han enseñado los Salvadores. Dice el Maestro
Santiago en las primeras líneas de "El Camino de la Renuncia":
"El renunciamiento es el Camino de Cafh, y no hay otro para la salvación
del mundo. El renunciamiento es el único medio de salvación
no sólo para los Hijos de Cafh, sino para toda la Humanidad".
Hemos trascripto en nuestros comentarios sobre el Maitreya varias Enseñanzas
y referencias de Santiago Bovisio sobre nuestra futura y probable relación
con el Iniciado Solar, y las formas de participación con su obra
redentora siendo compañeros, discípulos fieles junto a Él,
desde ya, ahora que está vivo y trabajando, aunque no lo veamos.
El más hermoso de estos instrumentos de acción real es el
Himno al Maitreya (Comentarios, Capítulo 3), que escribió
Bovisio especialmente para beneficio de los discípulos. También
son de provecho los conceptos, las informaciones y el conocimiento de
estos grandes seres que a lo largo de los siglos han ayudado a la Humanidad
a superar sus graves problemas, como los de estos tiempos.
El Maestro Santiago afirma que la destrucción planetaria será
muy grande e inevitable; pero que una parte de la humanidad se salvará.
Estos náufragos de la catástrofe, como ha ocurrido siempre
al comienzo de una nueva subraza, constituirán la base de la nueva
civilización. Nuestra misión, como discípulos fieles
del Maitreya y del Maestro Santiago, es tender puentes entre dos formas
de vida que se separan más y más. Debemos salvar a la mayor
cantidad de seres que podamos, especialmente los más jóvenes
y los niños, porque ellos formarán las raíces del
porvenir. Debemos enseñarles el Camino de la Renuncia. Debemos
inculcarles el desapego a las cosas perecederas y corruptas. Debemos practicar
con ellos la fraternidad humana. Debemos hacerles comprender que el bien
de todos está por encima del interés personal. Que sientan,
vean y experimenten que todo perece, y que lo único permanente
es la fuerza del espíritu.
Varias y medulares son las disposiciones anímicas que ofrecen las
Enseñanzas a lo largo de sus páginas para uso del hombre
de buena voluntad que quiera practicarlas. Pero en el tema de la destrucción
atómica la disposición clave es la no violencia. La destrucción
profetizada no es sino el final y el resultado de la violencia de todos
los días en todos los niveles, individual y colectivo, familiar
y social, económico y educativo, en los juegos infantiles, en el
trabajo, en los espectáculos, en las calles, en los hogares. Y
la primera disposición ha de ser apartarse integralmente de la
violencia. Repase el lector la Enseñanza "Valor y control
personal" (Libro I, 9)y verá qué sencillo es ser no
violento.
Todas las virtudes en el Camino de la Renuncia están enhebradas
con un hilo de seda, como en el rosario, vinculadas y dependiendo unas
de otras; el hilo de seda es la Renuncia. En las Enseñanzas del
Maestro Santiago las virtudes espirituales están explicadas ampliamente,
y todas son necesarias para ser corredentores junto al Maitreya. Pero
en el terrible asunto de la destrucción atómica hemos querido
hacer hincapié en la no violencia como punto inicial de la tarea
que se puede practicar continuamente, porque la violencia está
en todas partes. Sea entonces el Discípulo Fiel un abanderado visible
y sonriente de la no violencia que el mundo está pidiendo angustiosamente.
6.
Devastaciones Ambientales
Cuando Yuri
Gagarin ascendió al espacio en 1962 y vio el amanecer que se había
ganado porque iba más rápido que el sol, transmitió:
"La Tierra es hermosa y azul".
En las Enseñanzas el tema ecológico no está tratado
en forma directa porque en esa época la destrucción del
medio ambiente todavía no tenía el carácter grave
y público que tiene ahora; no obstante, la vida armoniosa con el
mundo que nos rodea, especialmente las especies vivientes, implica a cada
una de las expresiones de los escritos. Muchos creen que el Camino de
la Renuncia conduce al desierto, a un páramo desolado donde gobierna
el rigor y el sacrificio, a una falta de alegría. Nada más
equivocado; eso piensan los depredadores, los consumidores de placeres,
los que destruyen para beneficio propio. Por el contrario, la Renuncia
lleva a un jardín donde florecen mil flores conviviendo armoniosamente.
La Renuncia es desapego a las cosas impuestas por una sociedad devorada
por el lucro y el consumismo. La Renuncia es vivir armoniosamente con
todos, porque la Tierra, sostén de la vida, contiene los espacios
y las riquezas para que toda la Humanidad, sin exclusiones, pueda ser
feliz para siempre.
La conservación ambiental está plenamente desarrollada con
la misión del Maitreya, que es conciliación de los contrarios.
Si el hombre de la anterior civilización se ha comportado como
un conquistador, como un opresor de la Naturaleza, la nueva ley Acuariana
será de armonización especialmente con la Naturaleza.
No sabemos ahora cómo será el mundo dentro de un siglo ni
qué quedará de lo que conocemos. Los pronósticos
científicos fijan para dentro de 25 años el colapso ecológico
planetario. Tampoco podemos imaginar lo que quedará después
de la destrucción nuclear, pero podemos prever que las mil ciudades
más importantes del mundo serán mil Hiroshimas radioactivas,
fosforescentes y muertas. Pero hay algo que podemos imaginar: lo que quede
en pie será cuidado y protegido por los sobrevivientes como el
mayor de los tesoros, y la más insignificante flor del campo será
vista como una maravilla que los hombres deberán proteger.
En estos dioramas conceptuales de la civilización moderna que estamos
construyendo frente al lector para que tome conciencia del lugar donde
está parado, y por donde hacemos caminar imaginativamente al Maitreya,
lo mismo que nosotros, los rascacielos de Nueva York, las favelas de Río
de Janeiro, las poblaciones hambrientas de África Central, Chernóvil,
las matanzas de Palestina, el dinero, el sida, y tantas otras escenas
cotidianas, donde se juega el destino de la Humanidad, y nosotros podemos
ayudar al Redentor. ¡Qué inmensa y difícil es su tarea!
¡Tenemos que ayudarlo! En el curso de estas Enseñanzas está
desarrollado un programa de actividades de todo tipo, desde la oración
hasta la acción directa en la sociedad. Todos podemos y debemos
hacer algo constructivo. En las Enseñanzas el lector voluntarioso
podrá encontrar la forma de participar y de encontrarle un sentido
a la vida
7.
Desviaciones Genéticas
El cambio
de subraza provoca modificaciones sustanciales en varios órdenes
de la vida humana. Cada subraza dura un año sideral, aproximadamente
25.000 años, que es el tiempo de recorrer todos los signos del
zodíaco, o doce subrazas de familia de 2.000 años cada una.
Picis se inició con Jesús y se terminó hace poco.
Ahora empieza Acuario. Los Ario Teutónicos, que también
concluyeron, desarrollaron ampliamente el poder de la razón. Prueba
de ello son las conquistas de la ciencia y la tecnología.
Ahora se inicia un nuevo gran ciclo evolutivo con premoniciones guerreras
similares a la lucha con los Atlantes, y con modificaciones imprevisibles
en la psiquis humana. Una nueva manera de vivir necesita instrumentos
mentales diferentes. El Maitreya es el Ser que fija los objetivos de la
nueva humanidad. Poco y nada se puede decir de la misión del Gran
Iniciado, pues permanece en el secreto de su silencio, y es posible que
nunca lo declare en vida, sino que sus resultados se verán con
el tiempo. El Maestro Santiago ha adelantado algunas ideas al respecto
en sus Enseñanzas específicas; lo seguro es que las cosas
serán diferentes a lo que conocemos.
Las ciencias y las tecnologías derivadas están muy comprometidas
en las propuestas de anticipación y forman parte del mundo que
vivimos. Técnicamente son reales y eficientes, pero como no tienen
objetivos superiores, ni constituyen instituciones al servicio del hombre,
sino al poder del dinero, muchas veces caen en resultados degradantes.
Muchas son las técnicas avanzadas que se utilizan en medicina,
pero no se conoce lo que se está provocando realmente, ni sus efectos
a largo plazo en el ser de los afectados. Generalmente esas víctimas
caen en el submundo de los elementarios, del cual, después de la
muerte, es casi imposible escapar. La manipulación genética
a ciegas está produciendo daños irreparables a la especie
humana con efectos imprevisibles. Esta catástrofe ya ha ocurrido
anteriormente. Y la tradición lo recuerda. Léase en estas
Enseñanzas cómo la unión de los hombres con mente
con mujeres sin mente produjeron monstruos irreversibles.
En este tremebundo escenario de trasplantados, niños clonados y
fantasmagóricas especies animales y vegetales se está moviendo
el Maitreya. Tendrá que darle una solución para el futuro.
Creemos que estas técnicas de transformación son útiles
porque ayudan a cambiar radicalmente; la ciencia puede ayudar siempre
que encuentre el rumbo correcto en la dirección del mensaje divino.
Este Mensaje es la clave para enderezar los caminos, avanzando por la
Renuncia.
8.
Droga, Sexo y Epidemias
La Organización
Mundial de la Salud estima que hay 250 millones de drogadictos en el mundo.
El abuso sexual se ha extendido a todos los niveles de la sociedad, desde
los niños hasta los medios de comunicación masiva, constituyéndose
en un estilo de vida internacional. Las epidemias degradantes como el
sida y las enfermedades psíquicas aplastan a una buena parte de
la Humanidad. Y estos asuntos, entre otros que ya hemos mencionado, conforman
el panorama de problemas cotidianos que tendrá que resolver el
Maitreya para empezar a edificar la nueva raza. ¿O será
la destrucción atómica la que resolverá de un solo
golpe estas calamidades? Para construir Acuario cuyo tiempo ya ha comenzado,
los hombres tienen que cambiar. ¿Pueden cambiar de costumbres,
riquezas y karma 6.000 millones de habitantes del Planeta? La respuesta
es obvia; envueltos en las redes de su pasado irresponsable, esta civilización
caerá definitivamente vencida por sus propias armas, y dejará
la Tierra limpia para que otros hombres puedan hacer su tarea anunciada.
Si bien los problemas de la sociedad son imposibles de resolver colectivamente,
salvo la catástrofe final, las Enseñanzas del Maestro Santiago
hablan al individuo, al ser con sus posibilidades, y le presentan un programa
de acción y de salvación que se puede poner en práctica
ahora: el Camino de la Renuncia. Lo que no pueden resolver los Estados,
ni la Ciencia, ni las Religiones, ni el dinero, lo puede resolver el hombre
individualmente poniendo en acción los mecanismos de la Renuncia.
La Civilización no está en condiciones de salvarse porque
no posee los instrumentos para hacerlo; pero el ser sí puede porque
esos recursos yacen en su alma. La situación es crítica;
a partir del 2001 el tiempo se divide en dos para no juntarse más:
quienes permanecen en los valores del pasado quedarán ahí;
quienes arriesgan y avanzan en el desierto nuevo serán los compañeros
del Señor Maitreya.
La Humanidad avanza y se desenvuelve por etapas que están reguladas
histórica y astronómicamente en el tiempo. El individuo
se regula y comienza cuando adopta las normas de la nueva época.
Hemos tenido la suerte que un ser excepcional, el Maestro Santiago, adelantara
y comunicara por escrito las ideas directrices de Acuario, diera precisiones
sobre la Divina Encarnación, ya viviente, ha diseñado los
métodos de vida más apropiado a la época, ha explicado
el pasado y el futuro de los hombres, los ha invitado una y otra vez a
sumarse a los Discípulos Fieles, y les ha enseñado que son
libres y dueños de sus destinos. Las puertas están abiertas
para los que quieran cruzarlas.
9.
Supervivencia
Algunos intérpretes
fijan como fecha terminal de las profecías de Nostradamus entre
2020 y 2025. Igualmente, los pronosticadores de los cambios climáticos
señalan ese tiempo para la culminación catastrófica
del recalentamiento terrestre. Es también el plazo establecido
por rusos y norteamericanos para el despliegue completo del escudo antimisiles.
Quedan aún veinte años de moratoria para que las Enseñanzas
del Maestro Santiago lleguen a todo el Planeta. Quedan veinte años
de esperanza para que el Maitreya pueda enunciar sus leyes de futuro y
los hombres las reconozcan. Queda, en fin, un brevísimo tiempo
de meditación para tomar decisiones fundamentales. El mundo seguirá
dando vueltas como siempre; ahora sólo los individuos tienen libertad,
que es espiritual, para sí mismo, sin efectos sobre los demás.
¿Cuál es esa libertad que le queda al ser como único
bien intransferible, que no se adquiere ni se vende, sino que uno trae
al nacer como signo divino de la condición humana? La Renunciación.
Por la Renuncia el ser se libera de los efectos colectivos del karma y
permanece dueño de si mismo para las vidas futuras. Ahora se comprende
bien el Camino de la Renuncia; no es dejar estas o aquellas cosas que
de todos modos me las quitará la muerte; es entregarlas libremente,
desapegarse de ellas, tomar distancia y desinterés por las posesiones,
es ser uno mismo, y nada más. El vendaval de la muerte tocará
sólo la materia, y el alma quedará libre para las nuevas
experiencias de Acuario. Repetimos: el único bien que hoy poseen
los hombres individualmente es la Renuncia.
Es muy hermoso que el don que las generaciones de la antigua civilización
lega a los hombres de Acuario sea la libertad espiritual, como testimonio
indestructible de la condición humana, hasta llegar a la Gran Libertad
de la Unión con Dios.
Contemplemos el esplendor de la civilización que termina, sus inmensas
ciudades, las conquistas de la ciencia, los viajes espaciales, la multitud
de hombres prominentes que la enriquecieron con sus creaciones, sus obras
de arte excepcionales. También Atlántida fue maravillosa.
Y la civilización de Moo con sus edificios gigantescos. ¿Dónde
están esas antiguas civilizaciones? Desaparecieron sin dejar rastros.
También desaparecerán las obras de la civilización
moderna. Pero hay un bien que no puede ser destruido porque es divino:
la libertad espiritual que hoy asumen ostensiblemente los Discípulos
Fieles para trabajar junto al Señor Maitreya.
INDICE: COMENTARIOS
Capítulo
1: Las Enseñanzas Proféticas
Capítulo 2: El Legado Inmortal
Grupo A: Libros de Historia
Grupo B: Libros de Filosofía
Grupo C: Libros Doctrinarios
Grupo D: Libros Ascético Místicos
Grupo E: Libros Esotéricos
Grupo F: Libros sobre las Comunidades
Capítulo 3: Himno al Maitreya
Capítulo
4: Comentarios sobre el Maitreya
1. El Maitreya
2. Iniciados Solares de Cuarta Categoría
3. El Fuerte Libertador
4.Referencias Escritas en las Enseñanzas
Capítulo 5: El Escenario para el Redentor
1. El Mundo del Tercer Milenio
2. La Época
3. Escenografía conceptual
4. El Poder del Dinero
5. La Destrucción Atómica
6. Devastaciones Ambientales
7. Sexo, Droga y Epidemias
8. Supervivencia
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